🔵1. Ponte un objetivo claro y
realista
Márcate un objetivo realista y
fácil de conseguir. ¿Cómo? Buscando un método que te permita bajar de peso y
luego mantenerlo sin comprometer tu estado de salud. ¿Cuál es el mejor método
que te propongo? Cambia de hábitos y aprende a comer de una manera más
saludable, adapta una alimentación o estilo de vida más saludable a tu
situación o vida personal. Verlo desde esta perspectiva te ayudará a sentirte
más motivada/o, a llevarlo mejor y a no agobiarte tanto por cuantos kilos
deberás perder por semana, puesto que lo que tienes que mejorar es tu conducta
a la hora de alimentarte.
🔵2. NO te obsesiones por el
peso
“La mejor bascula es la ropa”.
Debes valorar tu evolución con datos más objetivos como pueden ser la ropa, el
que te quede mejor, el que te puedas poder un pantalón que antes no te entraba,
sentirte más deshinchada/o y ligero. El valor del peso varía mucho dependiendo
del momento en el que se peses, las condiciones, la cantidad de agua que hayas
bebido, el alimento que hayas consumido, la regularidad de tu tránsito
intestinal, el ciclo hormonal en el que te encuentres e incluso el nivel de
estrés que tengas actualmente. Puedes tener un control del peso, para ver
evolución, pero que no sea diario ni el único parámetro a tener en cuenta.
🔵3. Distribuye tu ingesta en
varias tomas a lo largo del día.
El error que se tiende a
cometer es pensar que cuantas menos calorías se ingieren mejor. Dejar de
desayunar o irse a la cama sin cenar no ayuda, al contrario, tal vez te estará
alejando sin darte cuenta, de tu objetivo. Ya que si pasamos muchas horas sin
comer puede aparecer ansiedad o hambre voraz que nos predispone a consumir
alimentos poco saludables que provocan un pico de glucosa en nuestra sangre,
con lo que volveremos a tener hambre al poco tiempo; y por otra parte, el
cuerpo interpreta esta situación como un ayuno y puede favorecer la adaptación
del cuerpo al ahorro energético. El número de ingestas recomendable al día
variará en función de nuestro horario, costumbres y estilo de vida, pero la
recomendación para adelgazar es hacer más de tres comidas al día. Completar
desayuno, comida y cena con un tentempié a media mañana o con una merienda
saludable. Tampoco vale saltarse comidas para “compensar los excesos” ya que
predisponemos al cuerpo a la situación comentada y no favorecemos la
adquisición de unos buenos hábitos.
🔵4. Aprende a decir que NO e
identifica posibles SABOTEADORES.
El saboteador es esa parte de
ti que te debilita poniendo excusas para no hacer algo que quieres o tienes que
hacer. Hay que aprender a decir que NO pero también hay que aprender a comer
por decisión propia, con conocimiento de causa y no por inercia, no porque la
situación te lleve a ello, ni porque el entorno te propicie a ello. Tienes que
aprender a tomar la decisión que más te apetece a TI, la opción que más se
ajuste a tu objetivo o a tu situación.
🔵5. Incluye la práctica de
ejercicio físico en tu rutina diaria.
NO realices ejercicio como un
método compensatorio de una mala alimentación, de ser así, te acabará pasando
factura. El ejercicio físico solo NO ayuda a perder peso si igualmente comes
más calorías de las que gastas. La práctica de ejercicio físico de manera
regular te ayudará a perder grasa corporal, evitará la adaptación del cuerpo a
la pauta y sobre todo mejorará tu forma física y tu salud, ya que, además, el
ejercicio genera endorfinas y aporta bienestar. Busca un deporte que te guste,
que disfrutes y que no te suponga esfuerzo introducirlo en tu rutina diaria.
🔵6. Planifica tus comidas.
Realiza una planificación semanal
de tus comidas y en base a ello, realiza la lista de la compra. Si la compra no
está planificada, es muy probable que acabes comiendo o picando cualquier cosa,
que perjudique la calidad de tu alimentación y dificulte la bajada de peso. La
presencia en casa de alimentos no saludables aumenta la posibilidad de fracaso,
por lo que podría decirse que es un factor determinante del éxito a corto y a
largo plazo. ¡Anímate a probar cosas nuevas! No es solo la frecuencia de
consumo de los diferentes alimentos lo que marca la variedad y la diferencia en
tu alimentación diaria sino la forma de comerlos y preséntalos. Te permitirá
disfrutar más del cambio que estás haciendo.
🔵7. Utiliza el método del plato
A la hora de planificar tus
comidas y cenas te aconsejo que tengas presente el método del plato que te
ayudará a asegurar que sean equilibradas, varias y a delimitar cantidades. Dar
preferencia siempre, con la mitad de tu plato, a los vegetales tanto crudos
como cocidos. Con las ensaladas la cantidad ingerida no suele ser suficiente,
por lo que además no debes olvidarte de consumir también verduras. Un cuarto de
plato deberá ser proteínas en forma de huevo, carne, pescado, marisco, proteína
vegetal o legumbre y el otro cuarto de plato deberá estar compuesto de hidratos
de carbono como pasta, arroz, patata o pan. El postre puede ser una pieza de
fruta o un postre lácteo.
🔵8. Prioriza el consumo de agua
frente a otro tipo de bebidas
Es el componente principal de
nuestro organismo. Mantener un buen estado de hidratación es muy importante y
se recomiendan beber de 1,5 a 2 litros de líquidos al día. Además de ser el
mejor recurso para saciar nuestra sed, puede servirnos para controlar el
impulso del hambre al contribuir a sentirnos más saciados durante el día.
🔵9. Se constante y perseverante
con tu objetivo.
No te rindas ante el menor
fracaso en la pauta. Piensa que es un cambio de hábitos lo que estás haciendo
por lo que no debes exigirte hacerlo perfecto sino mantenerlo en el tiempo e ir
haciendo pequeñas mejoras. Cualquier avance en tu conducta, en tu manera de
comer, es un avance hacia tu objetivo que te va a permitir conseguirlo y sobre
todo, mantenerlo.
🔵10. Cuida tu tiempo libre, tu
cuerpo, tu descanso y quiérete mucho
Haz actividades que te
resulten placenteras y que te ayuden a evadirte de los problemas y a liberar
estrés. Si tu vida está llena de cosas agradables, no necesitarás estar
llenando tu estómago a todas horas ni liberar tu estrés con la comida. Además,
vivir sin tanto estrés es el secreto de una mejor calidad de vida. Cuídate a
nivel emocional.
BONUS. Y no
comentas ninguno de estos errores cuando quieras adelgazar